“En muchos países en Asia no están acostumbrados a la participación activa en presentaciones, así que al acabar mi presentación nadie levantó la mano para preguntar nada (…) Para evitar que después vinieran uno en uno preguntando muchas veces las mismas preguntas, empecé con el primero y le pregunté su perfil y por qué quería hacer un Master...cuando acabó de explicar su perfil, me dijo "...y tengo 2 preguntas"...y así empezó la ronda de preguntas.”
“En una reunión con un distribuidor japonés le digo: "Estamos muy satisfechos por los índices de calidad de este último año. De 18 millones de unidades vendidas, sólo se han registrado 125 reclamaciones, que representa un 0,0007% de defectos." Y uno de los japoneses me responde: "No te equivoques. Así es como lo veis en Europa, pero para nosotros, la realidad es que a 125 consumidores les hemos entregado un producto defectuoso. Y ese es un gran problema."
“En Japón hay muchos protocolos para hacer negocios, desde la manera en cómo saludan…”
“Aparte de la gran cantidad de tiempo que hay que dedicar a socializar en el inicio de las reuniones con Chinos para ganarse su confianza.”
“Con el equipo de India, a todo te decían que si, porque culturalmente están acostumbrados a hacer y a no decir que no, o a dar matices. Sin embargo, a la hora de ejecutar alguna acción en concreto, el timing era más lento ya que cada acción les llevaba su tiempo aunque en un inicio te aseguraban que sí lo podían tener lo antes posible.”
“La primera vez que iba a vender un programa a Brasil quedé sorprendida de lo fácil que me fue. De esto hace 1 año y todavía no he conseguido cerrar el acuerdo... y eso que conozco la cultura por haber vivido allí...”
“Con las asociación de estudiantes chinos organizamos un acto cada año y a nivel de la gestión del mismo se complica al por ejemplo no decir ellos nunca no a nada, no responder a las cuestiones que no les interesan... “
“La gran sinceridad y franqueza de los alemanes, que no tienen ninguna piedad a la hora de señalar los defectos, incluso a nivel personal y en público, que según ellos, lo hacen "por tu bien”.
“Percibí que los estadounidenses son menos dados al contacto físico si no tienen mucha confianza, por ejemplo a saludarse no se dan 2 besos como aquí. Un día me tropecé en el laboratorio donde trabajaba en ese momento y el chico que estaba a mi lado, por no “tocarme” casi me deja caer con las manos llenas de material de vidrio. Con el tiempo nos hicimos amigos y le comenté que me extrañó que no intentara ayudarme a no caer y me dijo que le resultaba violento sostenerme con sus manos por el contacto físico, por si me pudiera yo sentir ofendida.“
“Lo que me cuesta cuando trabajo con estadounidenses es el exceso de autoestima de muchas personas (aparente)”